Lección 07. Mensaje a las siete iglesias 4

Apocalipsis

07. Mensaje a las 7 Iglesias IV

Pasaje base: Apocalipsis 3:7-22

Filadelfia, la iglesia que fue irreprensible

  ⁷ Escribe al ángel de la iglesia en Filadelfia: Esto dice el Santo, el Verdadero, el que tiene la llave de David, el que abre y ninguno cierra, y cierra y ninguno abre:

    ⁸ Yo conozco tus obras; he aquí, he puesto delante de ti una puerta abierta, la cual nadie puede cerrar; porque aunque tienes poca fuerza, has guardado mi palabra, y no has negado mi nombre.

    ⁹ He aquí, yo entrego de la sinagoga de Satanás a los que se dicen ser judíos y no lo son, sino que mienten; he aquí, yo haré que vengan y se postren a tus pies, y reconozcan que yo te he amado.

    ¹⁰ Por cuanto has guardado la palabra de mi paciencia, yo también te guardaré de la hora de la prueba que ha de venir sobre el mundo entero, para probar a los que moran sobre la tierra.

    ¹¹ He aquí, yo vengo pronto; retén lo que tienes, para que ninguno tome tu corona.

    ¹² Al que venciere, yo lo haré columna en el templo de mi Dios, y nunca más saldrá de allí; y escribiré sobre él el nombre de mi Dios, y el nombre de la ciudad de mi Dios, la nueva Jerusalén, la cual desciende del cielo, de mi Dios, y mi nombre nuevo.

    ¹³ El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias.

Introducción   

Filadelfia significa afecto fraternal, el nombre se lo puso Eumenés II, él fue rey de Pérgamo, tuvo un hermano llamado Atalo, él se distinguía por ser un hombre fiel y leal y Eumenes le puso un sobre nombre: Filadelfo.

Atalo fue comisionado para fundar una ciudad y Eumenés le puso por nombre Filadelfia en honor a su hermano.

Filadelfia se distinguía por ser un centro de difusión de la cultura griega. La ciudad fue destruida por un terremoto, pero fue reconstruida por el césar Tiberio. Los filadelfos hicieron un templo en honor al hijo de Tibero, llamado Germánico, además de ese había en Filadelfia muchos templos paganos, había uno para Zeus, el dios de los dioses, también había un templo para Artemisa, quien para los romanos era Diana, la diosa de la cacería, también había un templo a Helios, el dios del sol, otro a Afrodita, la diosa del amor, quien para los romanos era Venus, según la mitología, Venus tuvo un hijo a quien llamó Eros. Había un templo llamado Dionisio quien para los romanos era Baco, los romanos acostumbraban cambiar el nombre a los dioses.

En medio de esa ciudad tan idólatra floreció una iglesia cristiana.

En el siglo II, Ignacio de Antioquia, hablaba mucho en sus escritos de esta iglesia y se refería a ella como una iglesia ejemplar.

Filadelfia es el prototipo de la iglesia que Cristo desea.

La iglesia Filadelfia nos demuestra que se puede ser fiel a Dios en medio de la basura del mundo.

Jesús se presenta como el Santo, lo cual significa puro, limpio, sin contaminación, Jesús dice esto contrastando con todo lo impuro de los dioses paganos; el verdadero que significa genuino, esto contrasta con los dioses falsos de la mitología; el que tiene la llave de David, la llave en la Biblia siempre significa autoridad; el que abre y ninguno cierra y cierra y ninguno abre, esto significa que Cristo tiene la última palabra, que su poder es supremo, que no hay nadie que lo supere.

El elogio

Dios se siente orgulloso de esta iglesia, está contento, complacido con esta iglesia y le dice he puesto delante de ti una puerta abierta, esta iglesia tiene el favor de Dios, es bendecida en lo que haga (Josué 1:8).

Luego Dios le dice: “Aunque tienes poca fuerza”, la versión internacional dice “poco poder”, la palabra dunamis que es la original significa capacidad intelectual o económica. No era una iglesia donde los miembros tuvieran mucha capacidad intelectual o mucho dinero, de hecho la historia registra que era una iglesia pobre económicamente, pero a Dios no le importa eso, él puede usarnos como seamos.

El elogio para esta iglesia es hermoso: haz guardado mi palabra y no has negado mi nombre.

A Dios le interesa mucho que guardemos su Palabra, que la obedezcamos y que prediquemos su nombre, esta iglesia lo hacía, predicaba conforme a su Palabra, no conforme a sus ideas intelectuales.

El reproche

A esta iglesia Dios no le recrimina absolutamente nada, todo es elogios y promesas. ¡Qué hermoso!

El mandamiento

El mandamiento es sólo uno “Retén lo que tienes” eso es todo lo que Dios le manda a Filadelfia y la advertencia es “para que ninguno tome tu corona”.

Nuevamente con este pasaje se echa por tierra la doctrina de “una vez salvo siempre salvo”, Filadelfia era salva, pero si se descuidaba, si no retenía lo que tenía podía perder su corona.

La promesa

A Filadelfia se le prometen muchas cosas y cabe destacar que le da promesas no sólo para “al que venciere” sino también para su vida aquí en la tierra.

Abrirle una puerta que nadie puede cerrar.

Reconocimiento de los que se decían ser judíos.

Te guardaré de la hora de prueba.

Yo vengo pronto

Todas estas promesas se hacen antes de decir “al que venciere” y cuando se dice esto vienen mas promesas:

o lo haré columna en el templo de mi Dios, y nunca más saldrá de allí; y escribiré sobre él el nombre de mi Dios, y el nombre de la ciudad de mi Dios, la nueva Jerusalén, la cual desciende del cielo, de mi Dios, y mi nombre nuevo.

Yo lo haré columna en el templo de mi Dios y nunca más saldará de allí.

Escribiré sobre él el nombre de mi Dios

Escribiré sobre él el nombre de la ciudad de mi Dios

Escribiré sobre él mi nombre nuevo.

La carta termina diciendo “El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias.

Es sorprendente como Apocalipsis refuerza la doctrina de la unicidad. La cartas las dicta Jesucristo a Juan y él mismo dice una y otra vez que es Dios y al final dice que es el Espíritu el que está hablando con lo que se refuerza la realidad de que Dios es sólo uno.

Laodisea, una iglesia tibia

 ¹⁴ Y escribe al ángel de la iglesia en Laodicea: He aquí el Amén, el testigo fiel y verdadero, el principio de la creación de Dios, dice esto:

   ¹⁵ Yo conozco tus obras, que ni eres frío ni caliente. !!Ojalá fueses frío o caliente!

    ¹⁶ Pero por cuanto eres tibio, y no frío ni caliente, te vomitaré de mi boca.

    ¹⁷ Porque tú dices: Yo soy rico, y me he enriquecido, y de ninguna cosa tengo necesidad; y no sabes que tú eres un desventurado, miserable, pobre, ciego y desnudo.

    ¹⁸ Por tanto, yo te aconsejo que de mí compres oro refinado en fuego, para que seas rico, y vestiduras blancas para vestirte, y que no se descubra la verg:uenza de tu desnudez; y unge tus ojos con colirio, para que veas.

    ¹⁹ Yo reprendo y castigo a todos los que amo; sé, pues, celoso, y arrepiéntete.

    ²⁰ He aquí, yo estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi voz y abre la puerta, entraré a él, y cenaré con él, y él conmigo.

    ²¹ Al que venciere, le daré que se siente conmigo en mi trono, así como yo he vencido, y me he sentado con mi Padre en su trono.

    ²² El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias.

Introducción   

El nombre Laodisea significa juicio y es de llamar la atención porque es la carta más fuerte de las que Cristo escribe por medio de Juan.

Laodisea se caracterizaba porque tenían fábricas de textiles, fabricaban vestidos muy elegantes que exportaban a otros países, asimismo fabricaban alfombras con acabados muy finos, todo esto les producía muchas ganancias. La ciudad era muy rica económicamente. Todo el comercio de Asia menor estaba concentrado ahí.

Laodisea poseía una escuela de medicina y sus médicos habían descubierto un remedio para enfermedades de los ojos, era un polvo que se diluía en agua y que servía para varias enfermedades oculares, esto les trajo mucha fama y fortuna, a este remedio le llamaron colirio.

Jesús se presentó como el Amén, eso significa que si Dios dice algo así es, es cierto, es veraz, todo lo que promete cumple, también se presenta como testigo fiel y verdadero, él no le aumenta ni le quita nada a lo que atestigua; el principio de la creación de Dios, aquí no se refiere a que Cristo es un ser creado (Colosenses 1:15), sino que e él se inicia la creación, él es quien crea.

El elogio

Jesús dice: Yo conozco tus obras y no viene ningún elogio después, ni siquiera para unos poquitos.

El reproche

Cristo le reclama: “No eres frío, ni caliente”.

En Laodisea había unos baños donde había aguas termales, se esperaba que la terma estuviera caliente, pero algunas veces el agua fría se mezclaba y quedaba tibia. Cuando el agua estaba así la gente se quejaba pues así no les servía el agua, la repudiaban.

El agua fría que se usaba para tomar tampoco servía si se mezclaba con agua termal por lo que la tibia no servía para nada.

El que es frío espiritualmente tiene más esperanza que Dios haga algo, pero el que es tibio no reconoce que es pecador, se siente bien.

Después, en otras palabras Jesús les está diciendo “Me das asco” y enseguida les explica porqué.

A Dios no le gusta el orgullo, no le gusta la ostentación y esta iglesia se creía mucho, decían: “Somos ricos, no necesitamos nada”, no se daban cuenta de su condición espiritual, pero Cristo se las hace ver: “Eres un desventurado, miserable, pobre, ciego y desnudo”, esta iglesia necesitaba arrepentirse, pero antes del arrepentimiento tiene que haber reconocimiento de pecado.

El mandamiento

A esta iglesia más que mandamientos Dios da consejos y es un tanto sarcástico el mensaje de Dios en esta parte, les dice: “tú dices que estás rico, pero yo te aconsejo que compres de mí oro y vestidos”

El Señor en otras palabras les dice: “A ver si con tu dinero puedes comprar la santidad que yo requiero, la riqueza espiritual” y luego les dice “y unge tus ojos con colirio para que veas” nuevamente Dios utiliza algo que ellos tienen, el colirio, pero el Señor le da una aplicación espiritual, les está diciendo: “están ciegos aunque ustedes hayan fabricado el colirio, no les ha servido de nada porque no se dan cuenta de su condición espiritual”.

Después Dios dice algo muy hermoso: “Yo reprendo y castigo a todos los que amo”, si Dios no amara a esta iglesia la dejaría seguir en su tibieza, pero como les ama les escribe con severidad, con reprensión para que se arrepientan.

Sé pues celoso y arrepiéntete.

Celoso, quiere decir: “no admitas las mezclas, defiende tu fe, defiende mi Palabra” y arrepiéntete.

La promesa

A pesar de todo, hay esperanza para esta iglesia y la promesa para el que venciere es: “le daré que se siente conmigo en mi trono, así como yo he vencido, y me he sentado con mi Padre en su trono”, es decir que quien venza será como Cristo, tendrá el privilegio de sentarse con el Señor en su trono, esto tiene que ver también con autoridad.

Hasta aquí hemos estudiado las siete iglesias y creo que cada una de ellas nos ha dejado un mensaje especial para nuestras vidas, nuestra iglesia tiene similitudes y diferencias y Dios siempre nos habla a través de su Palabra.

Tarea:

Estudia el recuadro que hiciste de las iglesias ya que el próximo domingo se harán preguntas al respecto y habrá estrellas para quienes las respondan correctamente.

Investiga cuando menos dos interpretaciones que haya de lo que son los 24 ancianos y te ganarás una estrella dorada.